El sector industrial está en constante búsqueda de nuevas herramientas que le permitan ser más competitivo, generar un valor añadido para sus clientes, eliminar errores y reducir tiempos.
En este sentido, la asistencia técnica remota basada en Realidad Aumentada se ha convertido en la solución perfecta para la gestión de incidencias en la Industria 4.0 pero, ¿realmente conocemos todas las ventajas que puede aportar?
La gestión tradicional de incidencias en el sector industrial
Ante un problema con el funcionamiento de una máquina, el operario debe paralizar su trabajo para buscar una solución al obstáculo. Tradicionalmente, las opciones con las que cuenta para ello son varias, aunque todas ellas limitadas:
Buscar ayuda entre iguales
La falta de experiencia de los técnicos por la alta rotación de personal y por la inexistencia de un registro histórico de intervenciones genera no solo que no se solucione la incidencia, sino, además, que se paralice el trabajo de más operarios.
Contactar con un experto
La resolución de gran parte de los problemas técnicos es demasiado compleja como para poder ser resuelta mediante una llamada telefónica o un email y sin apoyo visual, por lo que, aunque esta opción acabe por atajar el problema, en ningún caso permite solucionar la incidencia de forma ágil.
Consultar el manual de la maquinaria
Habitualmente, la documentación existente sobre los procesos técnicos son manuales extensos y que no son fáciles de interpretar. Esta alternativa genera, por lo tanto, una gran pérdida de tiempo y no asegura encontrar la respuesta buscada.
Buscar una solución de forma autónoma
Aunque a priori podríamos pensar que toda la información existente está a nuestro alcance a golpe de clic, hay que tener en cuenta que experimentar con la maquinaria, además de alargar el parón de trabajo, no es seguro para el técnico. De hecho, el prueba-error puede empeorar la situación y causar consecuencias graves.
Entonces… ¿Cuál es la mejor solución para la gestión de incidencias?
La Realidad Aumentada, apoyándose en tecnología streaming, permite conectar a los técnicos con expertos cualificados en tiempo real para una gestión eficiente de las incidencias. Más allá de una mera videollamada, la Realidad Aumentada optimiza la comunicación entre los usuarios permitiendo superponer información sobre imagen real, como dibujos, anotaciones, símbolos o gráficos.

Si incluso esto no es suficiente, plataformas como ART permiten añadir a más expertos a la llamada para un diagnóstico y una resolución colaborativa. Con un sistema avanzado de traducción incorporado, la comunicación puede darse de manera fluida incluso entre personas de distintos países.
ATR también destaca por su capacidad de digitalizar el conocimiento generado durante la asistencia remota a través de la creación de informes colaborativos que permiten hacer un seguimiento de las problemáticas recurrentes y tener a mano una guía de su resolución.
Esta herramienta contribuye a alcanzar los objetivos de competitividad del sector industrial, reduciendo las brechas de conocimiento de la empresa y la demora en la toma de decisiones de los empleados.
Empoderar a tus empleados con tecnología de Realidad Aumentada puede ser la clave para llevar la gestión de incidencias un paso más allá